No acompañó la suerte esta tarde en Almonaster la Real. En primer lugar, con el toro que cupo en (mala) suerte. Un toro muy parado siempre, a la expectativa, reservón hasta la desesperación. Y segundo, con el rejón de muerte, tan certero en los últimos compromisos, pero que hoy anduvo destemplado. Fue sobre todo día de probar a los caballos más nuevos que se van incorporando a la cuadra de Andrés Romero. En este sentido, hoy debutó Fuente Rey, un caballo muy ligado a la historia profesional del onubense. Fuente Rey es el potro que ganó en el Certamen de Rejoneo de Atarfe que supuso su despegue profesional en 2012. Desde entonces lleva trabajando con él, con pausa y en el convencimiento de que va a romper en bueno. Y, a tenor de lo visto en Almonaster la Real, no anda desencaminado Andrés, ya que Fuente Rey se ha mostrado como un caballo mucho más hecho de lo que dice el hecho de que hoy haya sido su debut. Un debut exigente por el juego arisco del toro de El Chaparral, a pesar de lo cual el caballo se ha expresado con seguridad en la lidia y en el único rejón que clavó el torero con él.
Ya en banderillas sacó Romero a Cheke y a Hidalgo -otra de las novedades del año- que tampoco lo tuvieron fácil, pero que sí tuvieron la capacidad de llegarle mucho al ejemplar de El Chaparral, provocar el embroque y clavar reunido. Todo lo tuvo que poner el rejoneador ante lo parado del astado y fue con Bambú en las cortas, ya en el último tercio, cuando consiguió elevar el tono de la conexión con el tendido. Mediaron varios pinchazos antes del rejón final con Chamán y eso enfrío la petición de oreja, aunque, con todo, la hubo por parte del público.